El Gobierno cambiará el nombre del CCK: lo llamarán Palacio Libertad

Tras meses de especulaciones, el Gobierno finalmente confirmó el cambio de nombre del Centro Cultural Kirchner (CCK). El histórico edificio porteño pasará a llamarse Palacio Libertad, según lo dispuesto por la secretaria general de Presidencia, Karina Milei.

La decisión, que se oficializará mediante decreto en los próximos días, generó controversias en el ámbito político. Desde el kirchnerismo criticaron la medida, mientras que desde el oficialismo la defienden como un gesto simbólico que busca alejarse de la figura del expresidente Néstor Kirchner.

La posibilidad de cambiar el nombre al CCK se venía barajando desde la llegada de Javier Milei al poder. Se barajaron diversas opciones, incluyendo homenajes a figuras históricas como Julio Argentino Roca, Domingo Faustino Sarmiento o Bartolomé Mitre. Incluso se consideró recuperar el nombre original del edificio, Centro Cultural del Bicentenario.

Sin embargo, finalmente se optó por "Palacio Libertad", una denominación que, según argumentan en Casa Rosada, "engloba el concepto que queremos dar y no es partidario".

La decisión de cambiar el nombre del CCK no tardó en generar reacciones encontradas. El jefe de La Cámpora, Máximo Kirchner, criticó la medida y la calificó de "fuego de artificio". "Que le ponga Conan, pero que pare con los despidos en el sector público", ironizó.

Por su parte, desde el oficialismo defendieron el cambio de nombre como un gesto necesario para desvincular el CCK de la figura de Néstor Kirchner. "El CCK fue construido durante el gobierno de Cristina Kirchner y lleva el nombre de su marido. Creemos que es hora de darle un nuevo nombre que represente a todos los argentinos", señaló un funcionario del Gobierno.

Resta por ver cómo se materializará el cambio de nombre del CCK. Se espera que en los próximos días se oficialice la medida mediante decreto y se comience a implementar la nueva denominación en la cartelería y comunicaciones del edificio.

Más allá del cambio de nombre, el futuro del Palacio Libertad sigue siendo incierto. El edificio enfrenta diversos desafíos, como la necesidad de mantenimiento y la baja afluencia de público.