lunes 29 de abril de 2024

Ucrania restringió el consumo de luz y agua debido a los daños causados por Rusia en instalaciones estratégicas

viernes 21 de octubre de 2022

Los ucranianos redujeron el consumo eléctrico y algunos se quedaron sin agua corriente este jueves para aliviar la presión sobre la red y permitir la reparación de las infraestructuras destruidas por los ataques aéreos rusos, mientras las fuerzas de Kiev avanzaban hacia la ciudad de Kherson.
Aunque Ucrania está llevando a cabo exitosas contraofensivas contra las fuerzas rusas en el este y el sur, está luchando para proteger las instalaciones de generación de energía y otros servicios públicos de los ataques rusos con misiles y aviones no tripulados que parecen diseñados para perturbar y desmoralizar a medida que se acerca el invierno boreal.
Los ucranianos intentaron utilizar menos energía el jueves, después de que el Gobierno impuso restricciones a la electricidad en todo el país por primera vez desde la invasión rusa del 24 de febrero, tras un aluvión de ataques que, según el presidente Volodimir Zelensky, han afectado a un tercio de las centrales eléctricas. En virtud del nuevo régimen de ahorro de energía, el jueves se restringió el suministro eléctrico en toda Ucrania entre las 7.00 y las 23.00 horas.
“Los rusos han invadido nuestro país, hay mucha ira contra los líderes rusos y el pueblo ruso”, dijo a Reuters Mikhaylo Holovnenko, un residente de Kiev. “Pero estamos preparados para los apagones. Tenemos velas, bancos de energía cargados. Ucrania está cargada para ganar”.
Algunas tiendas de comestibles de Kiev dijeron que habían notado que la gente empezaba a comprar más botellas de 5 litros de agua mineral para prepararse para la posible escasez de agua.
Olaf Scholz, el canciller alemán, acusó al presidente ruso Vladimir Putin de usar la energía y el hambre como armas. “Las tácticas de tierra quemada no ayudarán a Rusia a ganar la guerra. Sólo reforzarán la unidad y la determinación de Ucrania y sus socios”, declaró Scholz ante el Parlamento alemán.
Dmitry Medvedev, jefe adjunto del Consejo de Seguridad de Rusia, dijo que Scholz era la última persona que debería hacer tales acusaciones. “El canciller alemán ha olvidado claramente el pasado nazi de su país y los 30 millones de soviéticos que fueron asesinados o murieron de hambre y frío durante la guerra”, afirmó.
El Ministerio de Defensa ruso confirmó que estaba atacando de nuevo las infraestructuras energéticas ucranianas, una estrategia que ha intensificado desde el nombramiento este mes de Sergei Surovikin -apodado “General Armagedón” por los medios rusos debido a su supuesta rudeza- como comandante de lo que Moscú califica como su “operación militar especial” en Ucrania.